El Boeing B777X se retrasa de nuevo

Oct 21, 2024 2026, boeing, Boeing B777X

El Boeing 777X (aunque esta denominación no es del todo correcta, ya lo explicaremos más adelante) será un gran avión, de eso no hay ni la más mínima duda. Sin embargo, su comienzo está siendo demasiado tropezado ya sea por factores propios o ajenos.
Esta misma semana, nos hemos enterado de que su gran estreno se retrasará aún más, ahora hasta el año 2026, cuando por fin parecía que todo estaba bien encaminado.

Historia de un avión que aún no tiene historia

Y no tiene historia precisamente porque no ha comenzado a escribirla. El avión, cuya entrada en servicio se esperaba para algún punto entre 2019 y 2020, todavía no ha entrado en servicio y ahora…la verdad es que ni las propias aerolíneas saben ya qué esperar.

El Boeing 777X es realmente tres variantes de la segunda versión del mayor bimotor del mundo, compuesta por el Boeing 777-9 (de momento única versión fabricada y que ha volado) y los Boeing 777-8 y 777-8F, estos dos últimas aún siguen solo “sobre el
papel” dado que no se ha comenzado la fabricación de ninguna de las dos variantes, si bien se ha confirmado que la que primero llegará será la versión carguera que, de momento, no se ha vendido nada mal.
En un ya lejano año 2011, Boeing decidió lanzar una versión remotorizada del 777 para competir con Airbus y su nuevo A350XWB, por lo que decidió llamar a su nuevo programa 777X. Así comenzó un desarrollo que preveía que el primer vuelo tuviera lugar a comienzos del 2019 para que el avión pudiera ser entregado a comienzos o mediados del 2020. Sin embargo, en 2018 y 2019 Boeing comenzó a sufrir la caída de confianza de las aerolíneas y los clientes tras los accidentes de dos 737MAX 8.
Estos accidentes pusieron en pausa a la compañía y con ella a su nuevo programa estrella: el 777X. Por tanto, el primer vuelo fue retrasado a comienzos del 2020 pero ya todos sabemos qué pasó a comienzos de ese fatídico año. Aún con todo, el avión realizó su primer vuelo el 25 de enero, antes de que todo quedase parado. Por supuesto que la pandemia del Covid retrasó el programa junto con la interrupción de las cadenas de suministro que fue una situación prolongada en el tiempo que tampoco ayudó.

Para colmo (para Boeing, claro) la FAA anunció su decisión de inspeccionar más “a fondo” el programa MAX y también el nuevo 777X, con pruebas más exhaustivas y nuevos controles. Boeing decidió retrasar aún más el programa por algunos fallos encontrados. El avión fue retrasado a 2024.

Pérdida de confianza…

El 777-9 sufrió algunos otros problemas menores que, en condiciones normales, no hubieran supuesto un retraso tan importante en un programa tan grande. Pero claro, ya nadie se fiaba de Boeing. Por lo que el fabricante decidió no lanzar el nuevo avión hasta que no estuviera completamente listo y se tomó la decisión de retrasarlo, aunque esta vez solo a 2025. En este punto, las aerolíneas ya echaban humo con Boeing y le estaban pidiendo explicaciones. Emirates, quiso incluso probar el 777-9X durante un mes en Dubái para asegurarse de que estaba acorde a los estándares ofrecidos, algo que nunca había pasado.

…y ahora de empleados

Boeing estaba negociando con los sindicatos las nuevas y futuras condiciones de los empleados de la compañía, en vista de comenzar la plena producción del 777-9 y la otras dos variantes. Además, también se sabe que el nuevo e hipotético “797” será
construido en el estado de Washington, por lo que un acuerdo con los representantes de los trabajadores era necesario.

Pero, al parecer, las negociaciones han sido infructuosas y Boeing ha anunciado el despido de casi el 10% de su fuerza laboral, lo que se traduce en unas 17.000 personas entre todas sus plantas, así como personal de oficina.
Esto, claramente, repercutirá en la capacidad de la empresa no sólo de diseñar nuevos aviones, sino de fabricar los ya existentes. A consecuencia de esto, Boeing anunció el fin de la producción del 767-300F en cuatro años (que de todas formas tenían que dejar de producir en 2027 por regulación medioambiental) y, sobre todo, el retraso del programa 777X una vez más.
Ahora, se espera que la primera entrega se produzca en 2026 pudiendo entrar en servicio incluso en 2027, con cerca de una década de retraso respecto al plan original.
Claro está, si no surgen nuevos retrasos que puedan afectar a la compañía o al programa.

¿Y ahora qué?

Para ponernos en contexto sobre si es importante o no este retraso (que evidentemente lo es), el programa 777X compuesto por el 777-8, 777-9 y 777-8F ha acumulado hasta la fecha un total de 501 pedidos y, claramente, 0 entregas. El mayor cliente de este modelo es Emirates con 240 unidades pedidas en firme y opciones por 50 unidades más. No es solo que la aerolínea de Dubái acumule casi la mitad de los pedidos totales del programa, que ya de por si es mucho, es que acumulan 35 de los 43
pedidos del 777-8, un modelo que depende de esta aerolínea.

Emirates ya ha criticado duramente la decisión de Boeing y es probable que tengan más de una reunión donde le expresarán su tremendo malestar. La aerolínea tendrá ahora que invertir mucho dinero en reacondicionar la flota pero no solo, dado que los planes de retirada de sus aviones más antiguos ahora han quedado en suspensión.
Además, ahora también tendrán que retrasar el inicio de nuevas rutas o el aumento de frecuencias a destinos ya existentes. Todo esto trastoca todos los planes de la compañía para, por lo menos, el próximo lustro, por lo que se puede entender perfectamente el malestar con el fabricante de Seattle.
Si Boeing empezará a sufrir cancelaciones en este programa por los continuos retrasos es algo que solo el tiempo dirá, sin embargo, las previsiones más optimistas ya no pintan bien para la compañía a pesar de los esfuerzos realizados en los últimos meses para volver a encaminarse en la buena senda.