El Gran Espectáculo

Nunca antes se había evocado de esta manera la furia de los duelos aéreos a seiscientos kilómetros por hora, la agonía en las llamas o el mortífero fuego antiaéreo de la Flak alemana.

Estos textos, escritos en caliente a diario después de las misiones, trasladan al lector al interior de la cabina de un avión de combate. Victorias, derrotas, pérdidas de amigos y sangrientas explosiones en el aire. Esos amaneceres a miles de metros de altitud, durante cientos de frías mañanas, siempre con la angustiosa duda de saber si ese día sería el último.

Considerado como uno de los mejores libros de memorias sobre un piloto de combate, El Gran Espectáculo constituye también un testimonio profundamente humano de las virtudes y sensaciones que la guerra suele dejar al descubierto: el miedo, el valor, la estima por el adversario, la repugnancia ante los horrores de los bombardeos, el valor de la amistad, la abnegación, etc.